Holi coco,

El guacamole, junto con el hummus, es uno de los pocos ‘dips’ saludables existentes en el planeta Tierra.

Ahora bien, debes saber -aquí un poco de cultura gastronómica- que el auténtico guacamole mexicano lleva cebolla morada, cilantro, tomate, lima, chiles, pimientos y cosas de esas que pican y que usan mucho por allí.

Si eres española, sabrás que:

  1. En nuestro país hay mucha gente “cilantro-fóbica” por tanto lo del cilantro va a ser que no.
  2. De la cebolla morada no somos muy amigos, en casa tenemos la cebolla de color blanco, de toda la life.
  3. Somos más de limones que de limas
  4. El picante no lo toleramos muy bien, somos unos pussys.

Dicho esto, yo he hecho una versión española y cutre del guacamole, que te quita el antojo y te salva igualmente del apuro.

Ingredientes:

Aguacates maduros a punto de morir

Tomate muy picadito

Cebolla muy muy picadita

-Chorrín de limón

Especias: yo utilicé chile y comino, porque yo lo valgo.

Sal

Machacas el aguacate con un tenedor, le añades las verduras picadas y pista.

Intenta no comerte el guacamole con media bolsa de doritos o triangulitos de maíz, que se nos va lo saludable por los cerros de Úbeda. Más bien ponte en modo conejo: pela unas zanahorias, unas rodajas de pimiento rojo y ponte a comer.

 

Comparte esta idea sana con tus amig@s pussys que no pueden con el picante o el cilantro.

 

Coco besis.

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